
ACERO TITANIO
, por Caterin Friedrich, 2 Tiempo mínimo de lectura

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¿Sabías que el acero de titanio se oxida, pero esto es una ventaja?
Cuando usas joyería de titanio, el metal reacciona con el oxígeno y forma una capa pasiva de dióxido de titanio (TiO₂). Esta capa es tan fina que ni la notas, pero actúa como un escudo invisible. Así, el acero de titanio en joyería se mantiene brillante y resistente, incluso si lo mojas o lo usas todos los días.
La oxidación natural del titanio no solo protege, también permite crear colores vibrantes mediante anodización. Este proceso, muy usado en joyería titanio, ajusta el voltaje para lograr tonos únicos sin pigmentos artificiales. Además, técnicas como el pulido y la soldadura en atmósferas inertes ayudan a mantener la superficie impecable y sin óxidos irregulares.
Los estudios científicos confirman que el acero de titanio se oxida de forma controlada y beneficiosa. La capa de óxido es impermeable, autorregenerativa y estable, incluso en ambientes húmedos o con sudor. Por eso, el acero de titanio se puede mojar sin miedo a que pierda su aspecto o se deteriore. Solo temperaturas extremas o productos químicos muy agresivos pueden afectar esta protección, pero en el uso diario, tu joyería de titanio está segura.
El acero de titanio es bueno para quienes buscan durabilidad y estilo. No tienes que preocuparte si el acero de titanio se oxida con el agua, porque esa oxidación es tu aliada. Además, la joyería titanio es hipoalergénica y biocompatible, ideal para pieles sensibles.
En resumen, el acero de titanio se oxida, pero esa oxidación es lo que lo hace tan especial en joyería. No solo protege, también realza la belleza y la vida útil de tus accesorios favoritos.